viernes, 31 de julio de 2009

A los que quieren aplicar para Diseño Industrial

Debido a que se acercan la fecha del cierre de convocatoria y van varias personas que me escriben preguntando sobre los programas de Diseño ahí les va un poco mi experiencia en el programa de Kyoto y lo que me contó una amiga que vino el año pasado a Kanazawa, así como las impresiones de otras chicas que han venido a diseño tanto a Kyoto como a Kanazawa. Al parecer para el año que entra será en Toyama que está en la misma zona que Kanazawa.

Antes que nada siento decirles que lo que ven como programa en la convocatoria (lo del proyecto paso por paso) lo descarten por completo. Si se dan cuenta, esos son los pasos que cualquier proyecto de diseño lleva, con sus respectivas variaciones de acuerdo a la naturaleza del proyecto. No se asusten, a lo que me refiero es que no esperen llegar y que les asignen un proyecto en el cuál trabajar toda su estancia porque no es así. El sistema educativo aquí, por lo que he visto, es muy independiente por lo que no les dirán exactamente que hacer. Esa es de las diferencias más radicales comparando con México.

Creo que más que pensar en que programa de diseño es mejor y cual es la diferencia entre ellos, les sugiero enfocarse en como quieren que sea su vida en Japón y cómo es su personalidad para adaptarse a una u otra situación.

Como todo en esta vida, las cosas tienen sus pros y contras, aquí les pondré los que considero importante.
¡Ojo! Tomen en cuenta que todo los que les digo lo hago desde mi perspectiva y experiencia personal, como dice el dicho: "Cada quién habla con le fue en la feria" y esta es "mi "versión)

KYOTO

PROS:
-¡Evidentemente la ciudad! Es la capital cultural de Japón por lo que existen infinidad de museos y actividades por hacer. En verano esta el Gion matsuri, uno de los 3 más grandes de Japón y al estar en el área de Kansai tiene muchas ciudades importantes cerca que valen la pena visitar. Tomen también en cuenta que estarán en el OSIC (es un tipo residencia en donde vivirán los primeros meses mientras toman el curso de japonés) por dos meses antes de que empiezen el curso de diseño y en ese tiempo se pueden visitar muchas cosas de esta zona, por si decidieran el programa de Toyama.

- El programa se da dentro de una universidad por lo que estarán en contacto con estudiantes de licenciatura y master, esto ayuda mucho en ver el modo de estudio/trabajo de este país y sobre todo al ser jóvenes están un poco más abiertos a conocer y hablar.

- ¡Hay muchas visitas! En los primeros tres meses del curso (vamos justo a la mitad), por lo menos hemos ido a 12 visitas diferentes, desde teñido de textiles hasta fábrica de incienso. Para mí ha sido algo que me ha influído mucho; los espacios y condiciones de trabajo, los procesos artesanales y/o semi-industriales es algo que no tenía muy presente ya que la imagen que generalmente se tiene de Japón es de tecnología y maquinaria automatizada. El ver como valoran a los artesanos considerándolos "maestros" o "artistas" es un ejemplo que deberíamos aplicar en México en donde la artesanía es poco apreciada, como sí el trabajo manual no valiera tanto cuando muchas veces es justo lo contrario.

- El OSIC al ser un centro para becarios esta constantemente recibiendo gente de todo el mundo, la verdad es que eso ha sido lo bueno de este lugar; el poder conocer y compartir con gente de distintos países y culturas.

- ¡Yamamoto sensei es la onda! La verdad que el sensei es super alivianado y accesible. A veces nos sacamos de onda en cuanto a la manera de trabajar de aquí, como que no sabemos exactamente que hacer o entregar porque las juntas y reuniones son en japonés, hemos tenido suerte que dos estudiantes saben bien inglés y son super amables y nos ayudan a traducir y transmitir las ideas.

CONTRAS:

- El OSIC se encuentra a mínimo 1 hora y media del KIT (Kyoto Institute of Technology), algunas veces se hacen hasta dos horas por lo que ir y venir diariamente se vuelve cansado y hasta tedioso.

- El OSIC tiene muchas restricciones y reglas, también eso llega a frustrar un poco porque a veces se siente como si tuvieras que pedir permiso hasta para ir al baño. ¡Todo está muy controlado! No esperen que si vienen a visitarlos puedan quedarse con ustedes porque imposible, ni siquiera pueden pasar del área del lobby.

- A veces el OSIC se llena de muchos becarios, hay veces que me he sentido un tanto agobiada porque todo está lleno; el comedor, el billar, etc.

- La comida aquí no es tan buena y después de un rato lo útlimo que quieres es volver a comer lo que hay en el menú porque no varía.


No puedo hablar mucho del otro programa porque al parecer al que vino mi amiga el año pasado no se abrió. Este año las 3 de diseño que venimos estamos en Kyoto. Nadie fue al otro programa; no sé si nadie lo eligió, o no se abrió, o no escogieron a nadie.

Mi amiga vivió en Kanazawa pero al parecer también había un programa en Toyama que esta cerca de esa ciudad, así que no se en donde vivían los que les tocaron en el programa de Toyama. Les hablaré un poco de lo que me han contado los de computer que viven allá.

KANAZAWA (talvez también TOYAMA)

PROS:

- Viven en un depa cada uno por lo que la libertad de ir y venir a donde y a la hora que quieras es algo buenísimo. Evidentemente también puedes alojar a tus amigos en tu casa, sean de los mismos becarios de otras ciudades o a quién quieran.

- Se mueven en bici para todos lados porque las distancias no son tan largas.

- También hay zonas interesantes por ahí y está más cerca de Tokyo para todos aquellos que les gusta esa ciudad.

CONTRAS:

- Mi amiga no estuvo en una universidad por lo que no es tan fácil convivir con gente joven o con quien convivir. Digamos que ya tenían su vida hecha y el que alguien más estuviera ahí no hacía la gran diferencia para ellos. Creo que los de Toyama si van a una universidad.



Disculpen si empiezo a escribir cosas que al parecer no tienen sentido o relación pero estoy tratando de recordar y pensar cositas que puedan servirles saber.

- No mucha gente habla inglés; igual y conocen el idioma y lo comprenden y leen pero que lo hablen no. Tal vez es que son tan perfeccionistas que si sienten que no lo dominan prefieren no hablarlo...o ¡talvez no se les da la gana!
- Si pueden ir empezando a estudiar el idioma desde ahora háganlo, de verdad que por lo menos conocer hiragana y katana puede hacer la diferencia.
- Cómo el nombre de la beca lo dice esto es un TRAINING COURSE por lo que practicaran sus habilidades al participar en proyectos. Saber modelar, hacer renders y modelos son habilidades que se adquieren en la carrera y que aplicaran aquí. Digamos que no es como maestría en donde te especializas en algo o aprendes cosas teóricas. No quiero decir que no he aprendido nada nuevo porque de todo se aprende en esta vida pero no se especializarán en diseño. Lo importante aquí es el vivir la experiencia de estar en el país y todo lo que conlleva tanto en la vida diaria como en el área de diseño.
- No esperen tomar clases en inglés porque no hay, si quieren pueden entrar a clases pero serán en japonés.
- Tener lap top propia con todos los programas necesarios es de gran ventaja.


Respecto "al proyecto", todavía sigue siendo un poco confuso para nosotras si proyecto es hacer uno personal o el participar en varios como lo hemos hecho hasta ahora. Personalmente yo vine con una idea de hacer un proyecto/investigación que me ayude a entrar a un PhD, por lo que le comenté al sensei mi interés y ayudó a contactar con otro sensei de la universidad especialista en el tema. Estoy trabajando en ese proyecto individualmente y espero tener buenos resultados antes de irme. Con las otras dos chicas de diseño queremos hacer un proyecto para aplicarlo en México al regresar.

El modo de trabajo aquí es mucho más independiente y libre que en México por lo que ya dependerá de cada uno de ustedes que es lo que espera obtener de esta experiencia. He escuchado que un becario alguna vez dijo: "preparate para las vacaciones pagadas más largas de tu vida" cosa que no veo tan difícil que pueda suceder si se depende de los demás para saber que hacer pero, obviamente sí se quiere, se pueden lograr muchas cosas de esta experiencia. No me gusta juzgar a nadie porque cada quién sabe lo que quiere de su vida pero espero que si toman la decisión de aplicar sea para obtener lo mejor para su vida laboral y personal. JICA no pide algo concreto a cambio de pagarnos la estancia, lo que podemos hacer nosotros es tratar de retribuir algo de lo que vivimos aquí aplicando y haciendo proyectos que puedan servirle a nuestro país.

Creo que por el momento es todo lo que recuerdo y puede servirles saber antes de tomar la decisión.

Suerte con el proceso!

miércoles, 6 de mayo de 2009

Clausura de "Nihongo no kurasu"

Finalmente este pasado 1º de mayo tuvimos la última clase de japonés y la ceremonia de clausura.

En total fueron 5 grupos con distintos niveles: en uno no sabían nada del idioma, en otro solo sabían cuestiones básicas como leer hiragana y katana (en donde yo estuve), otro con los que estuvieron tomando las clases de japonés ofrecidas por el Conacyt en el DF un mes antes de venir, otro con los que habían estudiado por más tiempo y el último con los que ya tenían varios años estudiando y ya manejaban muchos kanjis.

Las clases fueron intensivas pero muy útiles para poder comunicarnos al menos a un nivel básico con los japoneses ya que muy poca gente lo habla, o más bien, si saben pero no lo hablan, o por vergüenza o no se porque. Definitivamente el japonés no es un idioma sencillo ya que es totalmente distinto al español tanto en su escritura como en su estructura gramatical. En general, las clases fueron muy interesantes incluso divertidas.

La ceremonia final consistía en que un alumno de cada salón diera un "supiichi" en japonés (de mi salón me tocó darlo y vaya que me puse nerviosa), una "presentación artística" mexicana y finalmente la entrega de nuestros certificados.

Como parte de la "presentación artística" nos pidieron desde dos semanas atrás mostrar un baile y cantar una canción mexicana. Se escogieron representantes de cada grupo para ponerse de acuerdo en que se haría. Tuvimos la suerte que habían muchos gustos y talentos dentro del grupo, teniendo desde gente que participa en coros hasta un maestro de salsa, ¡que baila increíble lo que le pongan! Al final llegamos al acuerdo que sería más interesante contar un poco más sobre tradiciones mexicanas a la par del baile y el canto, por lo que contaríamos en 10 minutos el día de un cumpleañero. La historia contada empezaba desde que le llevaban serenata a la cumpleañera hasta la fiesta de cumpleaños con baile norteño, cumbia, piñata, mariachi en incluso lucha libre. A cada invitado se les dió un tríptico en donde venía explicada cada tradición.

La verdad es que quedó muy bien el showcito, al menos nos divertimos mucho en todo el proceso, desde la planeación hasta que lo hicimos; claro, con sus respectivos momentos medio tensos pero satisfactorio finalmente. Creo que los invitados también se divirtieron porque se rieron mucho de la lucha, ¡les quedó genial!

Esto fue prácticamente el final de esta etapa y la última vez que convivimos todos juntos ya que después de esto muchos nos fuimos a viajar por la Golden Week y hoy partió cada quién a su training course en las distintas ciudades. ¡Los voy a extrañar chicos!

Deleite final del sakura

Desafortunadamente no escribí esta entrada justo después de haber vivido la experiencia (en realidad ninguna ha sido así) para poder plasmar las sensaciones tal cual se sintieron.

Justo al final de la temporada del sakura me fui al Parque conmemorativo de la Expo de 1970 que se hizó aquí en Osaka y que queda cerca del OSIC, a un día de picnic bajo los árboles de cerezo.

Desde tiempo atrás tenía ganas de pasar un día sola y tranquila para poder disfrutar bien la primavera japonesa.

Es impresionante como hacer un picnic es una actividad común entre la gente. Cada fin de semana en distintos parques se pueden ver parejas, familias, gente sola disfrutando de un lunch al aire libre.

Una de las cosas que más me gustó del sakura es cuando justo está terminando. Es precioso ver muchísimo pétalos volando por los aires. Al principio cuando los ví a lo lejos pensé que eran mariposas volando. Cuando pude estar en un lugar debajo de los cerezos justo en el momento cuando soplaba el viento parecía una lluvia de pétalos. De verdad que es una experiencia sumamente bella.
Después de comerme mis noodles con vegetales y mi onigiri, me acosté a leer un rato y dormir una siesta; todo esto bajo la sombra de un árbol, suaves brisas y lluvias de pétalos. Ese día me sentí tranquila, feliz, en paz...

Venados y gran Buddha en Nara

Nara es otro lugar famoso en la región de Kansai. Los venados viviendo libremente en los parques y el gran Buddha del templo Todai-Ji eran las razones principales de la visita.

Es un lugar pequeño recorrible a pie, los parques son muy bellos especialmente en esta época de primavera con las flores de los cerezos.
Desde que empieza el recorrido poco a poco se empiezan a ver más y más venados totalmente libres. Son animales muy respetados ya que se consideran descendientes del venado blanco (leyenda japonesa). Por 300 yenes se puede comprar un paquete de galletas especiales para alimentarlos. Es cuestión de segundos para que te encuentres rodeado de estos animales pidiéndote los snacks, incluso dándote uno que otro tope si te llegas a tardar.

Llegando al Templo de Todai-ji te reciben dos inmensas imágenes de guardianes esculpidas en madera. Es impresionante el tamaño y el detalle con las que estan hechas. Son impresionantemente bellas.

Pasando este edificio el recorrido sigue hasta poder ver el edificio en donde se encuentra dentro el gran Buddha. El solo saber que el edificio se construyó para contener la estatua es impactante, más al ver el tamaño del edificio.

Entrando a este edificio la visión del Buddha de tal tamaño no puede ser más maravillosa. La solemnidad con la que muchos llegan demuestra que no solo es una atracción turística sino sobre todo un lugar de culto y respeto.

Dentro del edificio se encuentra un pilar de madera con un orificio grande en su base. Se dice que este orificio es del tamaño de la fosa nasal del Buddha y que si logras pasar a través de el serás un iluminado. Era muy divertido ver la cantidad de niños que pasaban por el, sobretodo ver como al extremo opuesto del orificio los padres estaban listos con las cámaras para la fotografía y ver las sonrisas de los niños listos para la foto.




Sakura en Kyoto, Geishas y Maiko



El sakura (cherry blossom) es algo que inmediatamente se asocia con Japón. Por suerte (aunque más bien creo que es buena organización) llegamos justo antes del sakura por lo que este evento era algo que no podíamos perdernos.

Kyoto es uno de los lugares más famosos para verlo por la cantidad de lugares para poder verlos como templos, jardínes, calles, etc. Este fue el motivo principal de este viaje a Kyoto, el poder disfrutar en su punto máximo este evento.

Uno de los lugares más agradables, especialmente en el sakura, es el paseo del filósofo. Una pequeña calle sinuosa con un riachuelo en medio al este de la ciudad, cubierta totalmente de estos árboles.

Solo ahora, después de haber podido pasear y ver estas flores, es cuando realmente se entiende porque es algo tan importante para los japoneses y sobretodo parte importante de su cultura.

Al final de nuestro día fuimos al barrio de Gion para investigar acerca del los shows de "baile de geishas". Poco a poco hemos ido sabiendo cosas nuevas y más a detalle sobre este tema. En primer lugar no son geishas las que bailan sino "Maiko", aprendices de geisha. El "Maiko Odori" se presenta una corta temporada en primavera por lo que era conveniente comprar los boletos con anticipación o bien llegar temprano. Hasta ahora lo que sé es que las Maiko se visten con colores más llamativos y las mangas de sus kimonos son más largas que las de las geishas.

El tema de las geishas y "lo que hacen" sigue siendo un misterio. Es impresionante pensar que en esta época sigan existiendo sobretodo en un país tan moderno con Japón, pero justamente lo que me gusta de este país es que sigan conservando muchas tradiciones fuertemente y sobretodo que se sienten orgullosos de éstas.

Poder estar con una geisha es algo accesible para muy pocos por la cantidad que se necesita, es incluso un símbolo de status. La curiosidad por verlas era muy grande, razón principal de querer ir a un show pero con la sorpresa que esa misma noche pudimos ver a una en la calle. ¡Todo un evento para nosotros! La sensación de verlas por primera vez (muy bien acompañadas) fue de lo más extraño, pero fue más extraño aún ver que no sólo nosotros "gayines" estabamos admirados, sino que para los mismos japoneses es todo un espectáculo. El comportamiento de la geisha era sumamente discreto y normal, hasta cierto punto altivo.

Saliendo de preguntar de Gion corner por los boletos pudimos ver a dos Maiko saliendo del lugar. Nuevamente todos los que pudimos verlas totalmente admirados corriendo tras de ellas para tomarles fotos. ¿Me pregunto qué sentirán ser observadas con tal curiosidad?

sábado, 25 de abril de 2009

Sakura matsuri




Nos invitaron a los becarios del JICA a participar en un festival del Sakura organizado por el Club Rotario.

Dentro de los invitados había gente local, una casa-asilo infantil, una casa para personas discapacitadas, etc.

Tuve la fortuna de que me tocara sentarme con los niños de la casa infantil. Al igual que la vez de la escuela, al cabo de poco tiempo y a pesar de mi torpe japonés, pasé un muy buen rato con los niños. No se porque me siento tan cómoda alrededor de ellos, al mismo tiempo que ellos me tomaron confianza muy rápido. Es curioso como el idioma muchas veces no es impedimento aunque claro ellos no dejaban de reírse de las cosas que trataba de decir.

Después de comer nos dijeron que si queríamos podíamos usar kimonos durante la fiesta, oportunidad que no podía desperdiciar. De verdad que hasta para cosas tan sencillas como vestirse las hacen todo un arte. Es bastante complejo ponerse uno pero gracias a la ayuda de las señoras tan amables que nos vestían al final pudimos disfrutar de la experiencia.

En la fiesta hubo un show de magia, prepararon un dulce típico a base de arroz, llegó una banda de música de jovenes universitarios y bailamos.

Es muy bueno que por parte del JICA organicen este tipo de eventos en donde podamos vivir este tipo de experiencias.

Sumo


Una de las cosas que me gusta de Japón es el contraste entre modernidad y tradición. En este país el pasado, el presente y el futuro viven en el mismo sitio.

Una de las tradiciones más antigua es el sumo, deporte nacional con más de 1500 años de antigüedad. Su orígenes fueron religiosos ya que los primeros encuentros eran rituales dedicados a los dioses. El sumo antiguo era una burda mezcla de elementos de boxeo y lucha, posteriormente bajo las reglas de la corte imperial se desarrollaron técnicas similares a lo que vemos en la actualidad. (Esta información la saqué del librito que te entregan al entrar al gimansio con la historia, las reglas, los rankins, ceremonias, etc.)

Ir a un dohyo y vivir la experiencia es algo que vale la pena vivir al menos una vez. La lucha en si no dura más que unos cuantos minutos, algunas veces incluso segundos pero pueden llegar a se muy emocionantes. Lo más impresionante de ver son los múltiples rituales que llevan a cabo antes de comenzar la lucha y la solemnidad con la que los realizan. Las posturas y movimientos, el arrojar sal, el agua, todo junto es lo que hace bella la experiencia. Otra cosa que es impresionante es la flexibilidad que tienen los luchadores. La mayoría de nosotros podemos pensar que el peso dificulta el moverse pero es admirable la rapidez de sus brazos y la altura hasta la cuál pueden levantar las piernas. Definitivamente una experiencia irrepetible.